Recordar a los difuntos y celebrarlos con una ofrenda es una tradición mexicana muy antigua que ha pasado de generación en generación. Se remonta a aproximadamente unos 1800 años a.c., cuando se acostumbraba sepultar a los muertos con ofrendas que incluían joyas, artesanías, comida, bebidas, objetos personales y artefactos importantes para ellos y sus familias. La tradición ha evolucionado a través de los años, y cada comunidad dentro de México, ha adoptado características diferentes de la festividad. Por eso vas a encontrar muchas variaciones del Dia de los Muertos en cuanto a colores, significados y elementos de los altares. Nosotras hemos aprendido de las tradiciones usadas en la Ciudad de México, donde mis abuelitos crecieron, y de Tabasco, donde nosotras vivimos por casi 15 años. Creo que nuestra parte favorita de la tradición es su complejidad, y la oportunidad de ser creativas al momento de decorar las ofrendas. También nos encanta el hecho de que aunque se trate de un tema fúnebre y de cierta forma triste, se celebra con muchos colores y detalles joviales. La razón es que en la mayoría de las culturas Mesoamericanas la muerte no representaba el final de la vida, sino el inicio del camino a una nueva forma de existir. Los colores de la tradición del Día de los Muertos son llamativos, vibrantes y alegres. Esta paleta multicolor se crea con el uso del papel picado y las flores de cempasúchil que rodean las calles y cementerios de las ciudades en México. También se pueden usar otras flores para decorar las ofrendas, y eso agrega más colores en la celebración.

Aunque el significado de los colores para el Día de los Muertos pueden variar en cada comunidad, algunos de los más usados y que caracterizan la festividad son los siguientes:

AMARILLO

Representa la fuerza de la luz y de la vida. También evoca al Sol, que en la tradición azteca, se cree que guiaba las almas de los difuntos.  La tradicional flor de cempasúchil es la que otorga este color amarillo en las decoraciones. Por eso se usan los pétalos de cempasúchil para hacer caminos, para guiar a los muertos hacía sus ofrendas.

MORADO

Representa el luto cristiano. Cuando llegaron a América los españoles en el siglo XVI trajeron sus propias celebraciones del Día de Muertos cristianas y europeas, donde se recordaba a los muertos en el Día de Todos los Santos. Al convertir a los nativos del nuevo mundo se dio lugar a un sincretismo que mezcló las tradiciones europeas y prehispánicas, haciendo coincidir las festividades católicas del Día de todos los Santos y Todas las Almas con el festival similar mesoamericano, creando el actual Día de Muertos y agregando el color morado, que simboliza en luto cristiano en la celebración.

NEGRO

Hace referencia a la religión prehispánica, al Tlillan, el lugar de la negrura, y al Mictlán, es decir el sitio de los muertos.

BLANCO

Significa luz, inocencia y la pureza. También se usa como una representación del cielo. 

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